8 de septiembre de 2006

En Comunion

Cambiaría mi reino por retroceder el tiempo al instante en que tomé esta foto.
Fué un momento de perfecta comunión con la naturaleza, una de esas pocas ocasiones que nos detenemos y reconocemos la maravilla de la creación.
Fué un instante sobrecogedor, de profunda humildad, de liberación... mi espíritu expuesto y en reverencia.

El sol terminaba de ponerse a mi espalda, el cielo todavía era una paleta de diferentes tonalidades de azul. Frente a mi, la luna serena y redonda brillaba como otro sol. A mi derecha, el mar abierto reventaba contra los arrecifes, a mi izquierda, las aguas rosadas e impasibles de las salinas, el aire limpio y salado.
Me arrodillé en la vereda soltaria, sentí la brisa en mi cara y dejé que las lágrimas corrieran...

1 comentario:

Anónimo dijo...

Muy poético !!!