14 de mayo de 2007

Corridas de Toros


Las corridas de toros son algo que me ha horrorizado desde que tengo memoria, a mi abuelo paterno le gustaban muchísimo y recuerdo ese tema de conversación en su mesa, mi padre -por su parte- capturó con su lente momentos espectaculares de la faena, y la imagen de los grandes toreros del mundo. A mi, siempre me espantó, siempre le fui al toro y siempre, secretamente, me alegré cuando le daban un buen revolcón y hasta una cornada a un torero.
Sorry, pero ese espectáculo sí que no va conmigo.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo soy de los que celebran cuando un toro cornea a un torero...no lo oculto

pati dijo...

Ni conmigo. He vivido a una cuadra de la Plaza de Toros de Maracaibo durante 32 años y sólo fui una vez a las corridas cuando era feliz e indocumentada... ¡nunca más! como diría Poe.

Petrusco dijo...

...y 100% de acuerdo contigo Maruja, no le veo ninguna ciencia (hablen lo que hablen los defensores de oh la ciencia del toreo) ni ningún atractivo estético o deportivo al hecho de marear con habilidad un animal angustiado para luego matarlo cruda y lentamente...pareciera una herencia del circo romano, salvaje y sin sentido.

Saludos!